Inspiración: La colección de Dolores Cortés ha llenado la pasarela de colores fuertes y estampado étnico, inspirada por las culturas mayas, andinas, aztecas y caribeñas. Colores: su apuesta han sido las numerosas gamas de colores vibrantes que conforman estampados tribales y exóticos. Destacan los colores flúor, que dan un aire moderno a la colección. Estampados: combina los gráficos geométricos primitivos con dibujos originales actuales en una sintonía inusual de lo ecléctico con la contemporaneidad. Algunos biquinis y triquinis recuerdan a la cerámica azteca, por la forma de estos estampados. Materiales: el principal protagonista indiscutible es el crochet, pero hacia la segunda parte del desfile se da paso a una mezcla de estampados que simulan tejidos, como la pata de gallo. Los ribeteados también tienen un papel importante a la hora de sugerir ese significado étnico de la colección. El corte: nos encontramos con biquinis hipersensuales, bañadores y triquinis que dan forma a los esculturales cuerpos de las modelos. Aparecen también corsés con trajes de baño que se anudan a la espalda con cordones, exponiendo al máximo la sensualidad de la mujer y siendo increíblemente favorecedoras. Las líneas son contundentes pero atrevidas. Destaca: la incorporación de colores flúor combinados entre sí para dar ese aire exótico a las prendas, lo que en definitiva supone una gran apuesta por el color. Nos encanta: el aire étnico de todos los complementos, que se adaptan y acentúan el espíritu tribal de la colección. Además su tamaño maxi podría ser un excelente acompañante de prendas más sencillas de cara a la temporada que viene. + 0 comentarios
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