La revista Lecturas ha sido la encargada de poner sobre la mesa esta dura confesión, motivada por una lesión en la espalda.
Durante el rodaje de 'Syriana', en el año 2005, el actor tuvo una aparatosa caída: "Pensé que tenía un infarto. Era como tener la sirena de un tren dentro de mi cabeza. No podía sostenerme en pie".
Tras un rápido traslado a Los Ángeles, los médicos le hicieron pruebas de todo tipo, sin dar con el origen de su dolor. Sin embargo, fue el hermano de Lisa Kudrow, conocida por su papel en la mítica serie 'Friends', quien dio con la clave.
El neurólogo se dio cuenta de que el actor perdía líquido cefalorraquídeo por la nariz y además descubrió que Clooney padecía una grave lesión en la espalda.
Fue entonces cuando los malos pensamientos inundaron la cabeza del actor, pues estuvo nada más y nada menos que tres semanas atado a una cama de hospital, con "dolores insoportables" y "mareos continuos".
"Llegó un momento en que pensé que no podía existir así, vivir así", aún así, Clooney sacó fuerzas y aguantó las nueve horas de operación que precedieron a una larga y lenta recuperación.
El actor ha reconocido que encontró su refugio en el alcohol, por ello, ha querido ingresar en un hospital de Dusseldorf (Alemania) para que el día de su boda no haya sorpresas y pueda prometer amor eterno a Amal Alamuddin.
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