La reina Letizia protagoniza una divertida anécdota en la Feria del Libro de Madrid al darse cuenta de que no llevaba dinero en efectivo para comprar libros. En un momento viral, se le ve pidiendo 20 euros a su escolta para realizar la compra, dejando un billete de 10 euros dentro de uno de los libros. Este episodio ha generado comentarios sobre su rol como madre y ha resaltado la cercanía de la reina con el público. Además, los reyes de España asistieron al 80 aniversario de la liberación de Mauthausen, cumpliendo con el protocolo establecido.
La reina Letizia ha protagonizado una anécdota que ha sacado sonrisas durante su visita a la Feria del Libro de Madrid, donde se conmemora el centenario de las casetas de libreros en la cuesta de Moyano. En su intento por adquirir dos libros, la reina se dio cuenta de que no contaba con dinero en efectivo, lo que la llevó a solicitar ayuda a su escolta.
En un momento divertido, su escolta le proporcionó 20 euros, y se pudo observar cómo Letizia realizaba el pago mientras indicaba a la persona encargada del puesto dónde había dejado el cambio. Esta escena fue comentada por Tatiana Arús, quien destacó que esta acción era "muy de madre", y mostró el clip viral en el que se aprecia cómo la reina colocó un billete de 10 euros dentro de uno de los libros adquiridos.
Alfonso Arús, desde el plató, subrayó que sería un “puntazo” que Letizia comprara el libro de Alba Gutiérrez, sugiriendo que como madre de dos hijas, esa compra podría recordarle momentos de su etapa maternal.
En otro ámbito, los reyes de España también hicieron acto de presencia en el 80 aniversario de la liberación de Mauthausen, acompañados por otros jefes de Estado. Durante este evento, ambos lucieron atuendos sobrios y formales, cumpliendo con lo estipulado por el protocolo.
La reina Letizia no llevaba dinero en efectivo cuando quiso comprar unos libros, por lo que tuvo que pedirle a su escolta que le prestara 20 euros.
La reina pagó los libros y dejó un billete de 10 euros dentro de uno de ellos, lo cual fue descrito como un gesto "muy de madre".
Los reyes asistieron al 80 aniversario de la liberación de Mauthausen, cumpliendo con el protocolo al vestir de riguroso luto.